
URSTAN PASS, AFGANISTÁN - MAYO DE 2007, Un soldado llamado Nehmat reza mientras está de guardia. Forma parte del Ejército Nacional Afgano, Compañ'a de Armas, 2¼ Kandak 3 Brigade 201 Corp., con sede en Gowardehs OP (observación) a 3 millas de la frontera con Pakistán ( Región de Nuristan). Esta compañ'a tiene soldados de todas las distintas tribus que viven en Afganistán.

URSTAN PASS, AFGANISTÁN - MAYO DE 2007: Ejército Nacional Afgano, Compañ'a de Armas, 2¼ Kandak 3 Brigade 201 Corp., con sede en Gowardehs OP (puesto de observación) a 3 millas de la frontera con Pakistán (Región de Nuristan), fuego de regreso a una supuesta emboscada cerca el paso de Urstan, uno de los puntos de tránsito más comunes de los talibanes para cruzar la frontera . Esta compañ'a tiene soldados de todas las distintas tribus que viven en Afganistán.

URSTAN PASS, AFGANISTÁN - MAYO DE 2007: Soldados del Ejército Nacional Afgano, Compañ'a de Armas, 2¼ Kandak 3 Brigade 201 Corp., con sede en Gowardehs OP (puesto de observación) a 3 millas de la frontera con Pakistán (Región de Nuristan) toman un descanso. Esta compañ'a tiene soldados de todas las distintas tribus que viven en Afganistán.

URSTAN PASS, AFGANISTÁN - MAYO DE 2007 Soldados del Ejército Nacional Afgano, Compañ'a de Armas, 2¼ Kandak 3 Brigade 201 Corp., con sede en Gowardehs OP (puesto de observación) a 3 millas de la frontera con Pakistán (Región de Nuristan) toman un descanso. Esta compañ'a tiene soldados de todas las distintas tribus que viven en Afganistán.

KABUL, AFGANISTÁN - FEBRERO DE 2009: Una pelea de perros, pasatiempo popular en este pa’s con poco entretenimiento. Es la actividad favorita de los viernes, después de las oraciones en la mezquita. Los lugareños apuestan con el resultado de estas peleas peligrosas, a menudo incluso colocan miles de dólares en apuestas individuales. Un atentado suicida en Kandahar en 2008 en una pelea de perros mató a 67 personas. Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTÁN - FEBRERO DE 2009: Niños trabajando en las calles en Kabul. Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTÁN - FEBRERO DE 2009, Una mujer con burqa y una chica joven sentadas en medio de un camino fangoso delante de una hoguera. Más de 3.5 millones de refugiados afganos han regresado a Afganistán desde Irán y Pakistán ltras la ca'da de los talibanes en 2001, para encontrar un pa’s en ruinas, sin trabajo ni vivienda para ellos., Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTÁN - FEBRERO DE 2009 Drogadictos en el antiguo Centro Cultural de Rusia en Kabul, donde hasta 1700 adictos van y vienen de este edificio de estilo soviético, inyectándose y fumando hero'na entre las ruinas y la basura. Es como una gran galer'a de tiro para 'adictos', donde se vende hero'na por 50 afganis (USD $ 1) por gramo. Los que tienen una adicción severa necesitan hasta 5 g por d'a, por lo que se ven obligados a robar y suplicar para alimentar su hábito. Hay más de 1 millón de drogadictos en Afganistán, la mayor'a de los cuales se volvieron adictos cuando estaban en el exilio tras haber huido a Irán o Pakistán, y ahora han regresado a sus hogares., Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTÁN - FEBRERO DE 2009 Drogadictos en el antiguo Centro Cultural de Rusia en Kabul, donde hasta 1700 adictos van y vienen de este edificio de estilo soviético, inyectándose y fumando hero'na entre las ruinas y la basura. Es como una gran galer'a de tiro para 'adictos', donde se vende hero'na por 50 afganis (USD $ 1) por gramo. Los que tienen una adicción severa necesitan hasta 5 g por d'a, por lo que se ven obligados a robar y suplicar para alimentar su hábito. Hay más de 1 millón de drogadictos en Afganistán, la mayor'a de los cuales se volvieron adictos cuando estaban en el exilio tras haber huido a Irán o Pakistán, y ahora han regresado a sus hogares., Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTÁN - FEBRERO DE 2009 Drogadictos en el antiguo Centro Cultural de Rusia en Kabul, donde hasta 1700 adictos van y vienen de este edificio de estilo soviético, inyectándose y fumando hero'na entre las ruinas y la basura. Es como una gran galer'a de tiro para 'adictos', donde se vende hero'na por 50 afganis (USD $ 1) por gramo. Los que tienen una adicción severa necesitan hasta 5 g por d'a, por lo que se ven obligados a robar y suplicar para alimentar su hábito. Hay más de 1 millón de drogadictos en Afganistán, la mayor'a de los cuales se volvieron adictos cuando estaban en el exilio tras haber huido a Irán o Pakistán, y ahora han regresado a sus hogares., Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTÁN - FEBRERO DE 2009, Un hombre con su bicicleta en Kabul., Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTAN - FEBRERO DE 2009, El antiguo mercado en Kabul., Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTAN - FEBRERO DE 2009, Antiguo mercado en Kabul., Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTÁN - FEBRERO DE 2009, Con temperaturas por debajo del punto de congelación, una mujer mira por la ventana hacia la sala de espera del Instituto de Malaria y Leishmaniasis, que recibe 50 nuevos pacientes por d'a y 200 pacientes que regresan. Estas enfermedades se transmiten a través de los mosquitos, pueden reproducirse fácilmente en las casas en ruinas de Kabul. Las picaduras pueden causar infecciones de la piel y úlceras internas que inflaman el bazo y el h'gado y pueden terminar siendo fatales. Hay tantos casos, que el medicamento utilizado como tratamiento efectivo si se toma durante un mes y medio, a un costo de alrededor de USD $ 150, se está acabando., Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTÁN - FEBRERO DE 2009, Cola de espera en el Instituto de Malaria y Leishmaniasis, que recibe 50 nuevos pacientes por d'a y 200 pacientes que regresan. Estas enfermedades se transmiten a través de los mosquitos, pueden reproducirse fácilmente en las casas en ruinas de Kabul. Las picaduras pueden causar infecciones de la piel y úlceras internas que inflaman el bazo y el h'gado y pueden terminar siendo fatales. Hay tantos casos, que el medicamento utilizado como tratamiento efectivo si se toma durante un mes y medio, a un costo de alrededor de USD $ 150, se está acabando., Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTÁN - FEBRERO DE 2009, Chequeo médico en el Instituto de Malaria y Leishmaniasis, que recibe 50 nuevos pacientes por d'a y 200 pacientes que regresan. Estas enfermedades se transmiten a través de los mosquitos, pueden reproducirse fácilmente en las casas en ruinas de Kabul. Las picaduras pueden causar infecciones de la piel y úlceras internas que inflaman el bazo y el h'gado y pueden terminar siendo fatales. Hay tantos casos, que el medicamento utilizado como tratamiento efectivo si se toma durante un mes y medio, a un costo de alrededor de USD $ 150, se está acabando., Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTÁN - FEBRERO DE 2009, Pacientes amputados y gravemente heridos se rehabilitan en Kabul. La Cruz Roja (CICR) lleva trabajando en Afganistán desde 1989 con vitcimas de guerra, que han perdido extremidades debido a las minas, durante tres décadas. Hasta ahora, han ayudado a 34, 000 amputados y a otros 54, 000 pacientes afectados por otras enfermedades, como la polio. Además, producen al mes en sus talleres de ortopedia; 600 prótesis de piernas, 1200 pares de muletas y 100 sillas de ruedas., Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTÁN - FEBRERO DE 2009 Saigedullah, un drogadicto, se sienta envuelto en una manta en el hospital psiquiátrico de Kabul. En la capital, solo hay un centro de ayuda a los drogadictos para superar la adcción, con capacidad para 4 camas. Los adictos pasan 10 d'as haciéndolo, solo para volver al ciclo de adicción en el momento en que ponen un pie en la calle., Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTÁN - ENERO DE 2009, Pacientes en la unidad psiquiátrica de Kabul. Tres décadas de guerras consecutivas han tenido un efecto significativo y perjudicial en la salud mental de muchos afganos., Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.

KABUL, AFGANISTÁN - FEBRERO DE 2009, Una mujer con burqa pide limosna tras la ventanilla de un coche en Kabul. Envueltas en sus burqas, esta sociedad que descrimina a las mujeres, les da a las viudas poca opción para mendigar en ausencia de sus esposos fallecidos., Afganistán se ha convertido en la zona de guerra clave para la nueva administración de los Estados Unidos. Después de años de concentración en Iraq, el gobierno de Estados Unidos se ha dado cuenta de cuán cr’tico es en realidad Afganistán. Es un pa’s demasiado acostumbrado a promesas incumplidas, a la muerte y a luchar por su supervivencia. Los afganos han perdido cada vez más la esperanza y la fe en las promesas hechas por el mundo occidental. Ahora parecen centrarse en la supervivencia diaria a pesar de las dificultades y los problemas sociales a los que se enfrentan de manera constante.
Afghanistan Despúes del 11 de Septiembre
Poco después de los atentados del 11 de septiembre de 2001, la atención militar de los Estados Unidos se dirigió a Afganistán, donde se encontraban los líderes de Al Qaeda. El mundo esperaba una invasión que muchos sabían que seguramente llegaría.
Lo que nadie sabía era que la invasión para derrotar a los talibanes y Al Qaeda se convertiría en una guerra que ahora se ha extendido a su decimoséptimo año, el más largo de Estados Unidos. Ha sido parte de tres presidencias estadounidenses y abrió una ventana hacia un país donde la modernidad chocaba con las costumbres tribales y los edictos religiosos.